Hay maestros de artes marciales en este ámbito que reclaman el segundo lugar en el mundo. Hay espadachines inmortales que atraviesan dos mil armaduras con una sola espada. Hay tímidos sacerdotes taoístas montados en toros que llevan dos a hombros. Puede ocurrir que un niño Jianhu muera o se ahogue ... Descripción completa
Hay maestros de artes marciales en este ámbito que reclaman el segundo lugar en el mundo. Hay espadachines inmortales que atraviesan dos mil armaduras con una sola espada. Hay tímidos sacerdotes taoístas montados en toros que llevan dos a hombros.
Puede ocurrir que un niño Jianhu muera o se ahogue en ríos y lagos cuando venga al mundo.
Quizás para el joven que aún no ha entrado en Jianhu, sostener la espada significa sostener todos los ríos y lagos. ¡Y el protagonista atraviesa a Jianhu de un solo golpe!
Al final grita: “¡Segundo Pequeño, sirve el vino!
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